martes, 1 de febrero de 2011

¿Te puedo pedir un favor? BÉSAME, bésame por favor ... que dentro de un rato no voy a sentir nada ... Voy a estar contigo sabes? porque no se cuándo me enamore de ti, ni cuánto, porque no hay metros cúbicos ni litros para medir todo eso y porque ... porque cuando andas con catarro hueles a vix-vaporub, y porque tienes un hueco aquí, entre el hombro y el pecho que cuando pongo la cabeza me siento en casa ... y porque en todas las fotos que tengo tuyas sales siempre sonriendo, en todas ... y tú? por qué te enamoraste de mi? … Yo no escogí enamorarme de ti, pero la primera vez que te besé nuestros dientes se rozaron por una milésima de segundo ... y fue increíble. Y la hora exacta de ese beso eran las 00:10 y quité la pila del reloj ... para que se quedase la hora detenida para siempre, parada. El minuto exacto en que me besaste, esta metido en un reloj, para siempre, y ya nunca se qué hora es ... pero me da igual ... y desde entonces miro constantemente el reloj … Sabes lo que me gustaría? estar tumbado contigo, sobre la hierba, mirando la luna esa naranja que hay algunas noches de verano ... y que empezara a nevar ... y sentir los copos en la cara, y tu mano … Hay momentos en la vida en que una sola decisión en un solo instante cambian irremediablemente el curso de las cosas. Cuando decides disparar a alguien, cuando decides querer a alguien, o no quererlo, cuando decides tirar para adelante, cuando decides mentir, traicionar, ocultar, o cruzar la línea ... esa décima de segundo podrá hacer girar todo al lado oscuro ... o inundarlo de luz. podrá hacer de ti un héroe o un criminal, podrá llevarte al cielo o al infierno, pero siempre será un lugar desde el cual no podrás volver atrás.

No hay comentarios:

Publicar un comentario